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Movilion

La estrategia móvil de Microsoft entusiasma y preocupa

Este viernes Microsoft lanzará una nueva versión de su sistema operativo Windows, y seguirá los pasos de Apple y Google al incorporar las aplicaciones y la interfaz táctil que tanto le gustan a la gente en sus teléfonos y tabletas.

Microsoft también lanzará una segunda versión de Windows que incorpora una tecnología de microprocesadores que gastan menos energía y que surgió de los teléfonos celulares. La decisión generó fricción con Intel, el fabricante de chips que es desde hace mucho tiempo un socio clave de la empresa y creó oportunidades para otros fabricantes de chips que se habían quedado al margen del mercado de PC.

“Para gente como nosotros, todo parte de cero”, sostiene Anand Chandrasekher, director de marketing de Qualcomm que suministra chips para algunos de los dispositivos con Windows.

Microsoft también sigue a Apple y Google con el lanzamiento de Surface. La presión por el cambio es fuerte. Las ventas de computadoras personales, donde Microsoft es líder, han menguado a medida que los usuarios optan por los teléfonos inteligentes y tabletas. Microsoft apuesta a que el nuevo Windows con funciones táctiles atraerá a los clientes corporativos e impulsará el desarrollo de tabletas, laptops con pantallas táctiles que se pueden convertir en tabletas que usen Windows.

El precio podría ser un tema. Se espera que Apple anuncie el martes una versión más pequeña del iPad, cuyo modelo más básico actual empieza en 499 dólares en Estados Unidos. Algunas tabletas que usan el sistema operativo Android de Google cuestan solo 149. Los fabricantes están ofreciendo tabletas con Windows que van desde 600 hasta más de 1.000.

Un factor que añade incertidumbre es la decisión de Microsoft de ofrecer dos versiones de su software, Windows 8 para los chips tradicionales x86 de Intel y AMD; y Windows RT para los chips para teléfonos inteligentes licenciados por ARM, Qualcomm, Nvidia y Texas Instruments.

Windows 8, no obstante, cuenta con una ventaja obvia: puede funcionar con las nuevas aplicaciones móviles así como con las aplicaciones de su versión anterior. En cambio, Windows RT no funciona con los programas más antiguos.

Microsoft generó tensión al obligar a los fabricantes de chips a trabajar con uno o dos de los fabricantes de los aparatos, una estrategia empleada por Google para asegurar que el hardware y el software se complementen bien.

Además, sorprendió a los fabricantes de computadoras con el anuncio de Surface. Pocos ejecutivos criticaron públicamente a Microsoft, pero algunos usan adjetivos como “anonadados” para describir su reacción.

Vía WSJ.